La verdad es que siempre me han pasado cosas muy extrañas y he vivido experiencias de todo tipo quizás por mi afición pasearme por los rincones más solitarios de Sevilla, hay que recordad que Sevilla es una ciudad preciosa y no hay parque que no tenga su encanto. Esto me sucedió la semana pasada y el caso es que era una tarde muy calurosa y decidí ir a darme un paseo con la moto sobre las 4 de la tarde para ver si me daba un poco el aire y se me quitaba el agobio.
La ciudad estaba vacía porque la gente se suele ir a la playa y los que no tenemos vacaciones estamos en la cama debajo del aire acondicionado, por lo que después de un rato dando vueltas acabé en un parque lleno de árboles muy altos en el que hacía bastante fresquito y donde no había estado nunca. Me senté en un banco a fumar un cigarro tranquilamente y de repente escuché lo que parecían los gemidos de una chica y unas risas, realmente no sabía si le estaba pasando algo o si eran un grupo de jóvenes simplemente pasándolo bien.
Como soy bastante curioso decidí acercarme sigilosamente a la zona de donde provenían las voces y en principio no acertaba a ver a nadie, pero bajé un sendero que daba a un pequeño riachuelo y la escena que me encontré fue de película, pero de película porno porque había una chica completamente desnuda a 4 patas y un tío dándole tanta caña que podía escuchar perfectamente cómo su barriga golpeaba sus nalgas y se escuchaba el típico «plas, plas, plas» y eso que estaría a unos 20 o 30 metros. Detrás de ellos habían 3 tíos, uno grabando con una cámara y los otros dos dando instrucciones a modo de directores. Si amigos, estaba presenciando un rodaje de cine adulto y lo mejor de todo es que era español, no sé vosotros, pero yo estoy harto de ver videos de sexo americanos, chinos, alemanes o de europa del Este, por lo tanto, poder ver cómo rodaban una escena en vivo fue para mi como un sueño.
Pero la cosa no quedó ahí, de repente uno de los chicos se giró hacia mi y me dijo: ¿que tal amigo?, ¿te animas a participar?, yo me quedé de piedra y no sabía muy bien como reaccionar, pero decidí acercarme más a ellos puesto que había sido invitado. Participar era demasiado para mi, pero les dije que si no les importaba que me quedara un rato para ver cómo trabajan las productoras Españolas, a lo que ellos me dijeron que no había ningún problema y que estaban encantados de tenerme como espectador.
No os imagináis cómo me sentía viendo aquello y encima totalmente gratis, ese es probablemente el sueño de muchos hombres y es que estás viendo cómo se graba uno de los vídeos con los que luego tú te masturbarás en tu casa. Otra de las cosas que más me gustó es que esa actriz porno era una de esas chicas jovencitas de 18 o 19 años que hacen cualquier cosa que les pidan por dinero, son chicas muy caprichosas, ardientes y muy liberales, por lo tanto no les importa en absoluto que millones de personas las vean fornicando en pantallas del ordenar. También era una jovencita muy simpática y volvió a decirme que si quería participar, que estarían encantados de hacerme un hueco porque le parecía muy guapo… Ufffff, me temblaban las piernas y estuvo apunto de decirle que si, pero luego me lo pensé mejor porque tengo novia y creo que si mi familia se enterase me desheredarían.
Al cabo de un rato terminaron y opté por marcharme a tiempo no fuera que cayera en la tentación de tener sexo allí mismo. Espero que mi experiencia os haya gustado y os sirva para daros cuenta de que en cualquier momento te puede pasar algo que te cambie la vida, de hecho soy tan feliz en Sevilla porque puede pasarte de todo y cuando digo de todo es DE TODO…